Los protagonistas de nuestra historia son una inocente niña y un gigante que salió de la fantasía; la niña es tierna, dulce, curiosa, siempre lleva puesto un vestidito de color rosado, su piel es tersa, suave y delicada, es muy pequeña.
Un día la niña caminaba por la casa donde vivía con sus padres y hermanos, su familia era muy grande; a la niña le llamó mucho la atención que en la puerta de su casa había una criatura, tenía ojos hermosos, negros, sus orejas eran pequeñas y tenía una cola larga, además se veía peluda, pero su pelaje era suave y brillante, también era gordita y le produjo mucha confianza y la niña no sintió miedo.
La niñita que apenas empezaba a hablar corrió al lado de su mamá, quizo decirle que había visto un ANIMALITO MUY LINDO, pero solo dijo cuatro palabras: pan, ratón, mamá, nené.
Ese día la casa estaba llena de gente, posiblemente había una reunión familiar, todos empezarón a correr y a gritar, la niña se asustó y sintió que se le iba a salir el corazón, no entendía porque todos trataban de matar el hermoso animalito, en un momento el animal corrió debajo de los pies de la niña, este fué un momento muy duro, la niñita sintió que se iba a desmayar.
DESDE ESE DIA LE TENGO MIEDO A LAS RATAS (dice la señorita que ya no es niña)
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